Me desvivo en vano,
entrega de yo a mí,
cuánto ego, te alimento, me alimento,
búsqueda que simula no tener fin.

Llego a ver la estructura,
romper con ella y
mis pretenciones,
las palabras,
los esquemas que acabaron gobernándome.
Distancia de mí, para ver mejor, cancelarme.

Ay! ingrata pretención,
inexorable espera...
búsqueda de la descomposición,
del quiebre... 

Aún no termino de reconstruírme,
búsqueda interminable de bienestar.
Ego, ego...
me ocupo tanto de mí que me canso
ay instancias del yo, que me vuelvo cerrada
troncho....no espero.

cuan incapaz resultaste ser?

no me voy a detener
no se supone que espere
no se supone que suponga
espero dejar de esperar.

paso a paso
cada vez
rompiendo
con
las voces
que me fueron impuestas
todas son yo, pero no todas fueron creadas por mi

"Subir un escalón, no es dejar atrás a nadie."

Y es que me deterioro conformándome,
SENTENCIA!
sentencia
que aún no termina.
Añoranza del fin.
Tirando al olvido las fuerzas,
te olvidas sin más,
empañando,
dejando atrás las delicadezas,
ya no se crece, ya no se afianza...
sólo aleja.
La voz de la distancia
grita detener la puesta.

¿Por qué no puedes darle espacio?
Respeta sus necesidades de espacio.
Creo que la comprimes
en un espacio muy pequeño.
Con clarividencia,
ella sabía qué necesitabas,
y te lo dio.
Ahora sus deseos están reprimidos;
flechas en la carne.
Cuando encontró tu amor,
su naturaleza inclinó su cabeza;
se rindió,
renunció al mundo por ti,
y ahora está envenenada por peticiones
que no puedes contestar.
¿Por qué este sacrificio?
Ahora se arrepiente de todo esto,
una reacción retrasada
cuando abandonó voluntariamente su obra.
por tu nido, por tu amor.
¿Lo has entendido?
Aprecia,
construye un puente hacia ella.
Inicia un contacto
antes de que sea demasiado tarde,
dile las palabras
que la harán relucir.
Dile que la quieres.
Tu generosidad se demostrará
en el volumen de sus destellos.

Bjork-Sacrifice

Realmente estoy cansada. Me aburre ya no saber nadar en el desconcierto. Estoy cansada de intentar, de dar, de que las manos tan corrompidas se manifiesten así, de que el cerebro se ahogue en la propia sangre y temor. Estoy sofocada en mis archivos contradictorios de decir y no, de ser y no, de pensar y dejar. Estoy harta de las no-respuestas...que jamás van a llegar. Necesito olvidar el aferro a la promesa, promesa nunca antes dicha, promesa jamás cumplida...Y es que necesito volver a las palabras poco sentidas.

Me perdí, me estanqué, el ego me arrastró...me dejé arrastrar. Y ahora no puedo reconocerme, no puedo reconocer a nadie, no puedo entender. Las figuras se deforman junto a los sonidos, mi cuerpo no quiere que lo habite, está extasiado de lo absurdo, miles de hormigas corretean histéricas por mi cerebro, caos: no puedo detener a ninguna.
¿Dónde quedaron mis palabras? ¿Dónde quedó mi silencio?
Me extraño

...Y así sin lástima como la forma más extrema y más hermosa de la lástima irme llevando al grito y al llanto, desnudarme de otra manera que quitándome la ropa, invitándome al salto, a la implosión y al vértigo.

Julio Cortázar

Se retrocede con seguridad
pero se avanza a tientas

descubriendo, pretendiendo alcanzar
quién eras tú detrás de esa cortina,
quién era yo detrás de mí.
Y todavía no hemos visto nada.
Espero que alguien venga, inexorable,
siempre temo y espero,
y acabe por nombrarnos en un signo,
por situarnos en alguna estación
por dejarnos allí, como dos gritos
de asombro.
Pero nunca será. Tú no eres ésa,
yo no soy ése, ésos, los que fuimos
antes de ser nosotros.

Mario Benedetti

el olvido está lleno de memoria
que a veces no caben las
remembranzas
y hay que tirar rencores por la
borda
en el fondo el olvido es un gran
simulacro
nadie sabe ni puede 

aunque quiera 

olvidar
un gran simulacro repleto de
fantasmas
esos romeros que peregrinan por
el olvido
como si fuese el camino de
santiago

Mario Benedetti